13 de junio de 2011

Nietzsche, Nicholas Carr e Internet

Quizá Nicholas Carr, el autor de Superficiales ¿Qué está haciendo Internet con nuestras mentes? (Taurus, 2011) ha leído a Nietzsche. Al menos, hace referencia a un episodio de su vida para ilustrar cómo la herramienta modifica el mensaje.

Si no, le encantaría descubrir este texto:
Están ellos sumergidos en ilusiones y fantasmagorías; su mirada no hace más que deslizarse sobre la superficie de las cosas, percibiendo "formas"; su sentir no conduce en parte alguna a la verdad, sino que se contenta con recibir estímulos y entretenerse, como si dijéramos, con un juguetón tanteo del lomo de las cosas.
Friedrich Nietzsche, Sobre verdad y mentira en sentido extramoral (1873)

Aunque, seguramente, el filósofo hubiese tenido mucho éxito publicando sus aforismos en Twitter ...

2 comentarios:

  1. Nunca había leído este texto, pero es un reflejo de lo más acertado de la llamada "sociedad de la información", un exceso y bombardeo de noticias y estímulos, la mayor parte superfluos y faltos de interés, que impiden reflexionar; a muchos se les llena la boca con "libertad de expresión", pero ésta no es tal si no existe un acceso real a la cultura y se forma a las personas para que sean capaces de elegir libremente, con capacidad crítica y capaces de discernir entre lo verdaderamente importante y real, de lo superficial y "maquillado" que transmiten los medios de comunicación y "poderes públicos" no pocas veces.

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  2. Cita muy bien traída. Leí también en algún libro de Nietzsche una frase que más o menos decía: "que el fragor del mundo te llegue como un lejano eco".
    Con tu permiso, tomaré tu cita para alguna ocasión en la que hable de la infoxicación.

    En cuanto a lo que hace internet con nuestras mentes,,, creo que hará lo que le dejemos hacer. A mí me ha venido muy bien para mejorar mi escritura y encontrar espíritus afines. Supongo que todavía estamos aprendiendo cómo usar el medio. Para mí es el más flexible y rico que existe. También creo que si "el camino del exceso conduce al palacio de la sabiduría" (William Blake) estamos todavía en este camino.

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